Esta malla, que tiene su origen en la trilogía de 'El Señor de los Anillos', permite que el 80 % del aire fluya a través de la cubierta de los edificios, reduciendo la temperatura hasta 12 grados.
La innovación está de moda en el sector de la edificación y cada vez son más las alternativas para poder climatizar los domicilios que van más allá de los sistemas tradicionales. La pintura más blanca del mundo, un aire acondicionado de papel, o el combustible de hierro y las baterías de sal que podrían sustituir a la calefacción de gas son solo algunos de estos ejemplos.
Otro de estos proyectos de innovación es Kaynemaile, una malla que tiene como objetivo refrescar las edificaciones sin consumir más electricidad.
Este novedoso sistema logra bloquear el 70 % de la radiación solar y solo dejar pasar el aire para mantener fresco el ambiente. Además, permite que el 80 % del aire fluya a través de la cubierta de los edificios, reduciendo la temperatura hasta 12 grados.
La malla está fabricada por un polímero de biomasa, que incluye un 88 % de componentes no basados en combustibles fósiles, lo que reduce significativamente su huella de carbono.
‘El Señor de los Anillos’ como origen del proyecto
Lo más llamativo de este novedoso sistema es que tiene su origen en la trilogía de ‘El Señor de los Anillos‘, concretamente en los 80.000 anillos tejidos a mano y hechos con un tubo de polipropileno galvanizado revestido de plata.
Este diseño fue obra del director artístico de Criaturas, Armaduras y Armas de la trilogía, Kayne Horsham, que posteriormente decidió aplicar esta tecnología a la arquitectura y a la protección de los espacios exteriores de los edificios.
Desde la página oficial de Kaynemaile explican que “nos asociamos con arquitectos, diseñadores de interiores y firmas de diseño o construcción en proyectos que utilizan los atributos únicos de nuestra malla en su potencial y han logrado resultados sorprendentes, a tiempo y dentro del presupuesto”.
Otros proyectos innovadores
Cabe recordar que en el año 2021, los investigadores de la Universidad de Purdue (Estados Unidos) lograron desarrollar la que es la pintura más blanca del mundo, que es capaz de reflejar el 98,1 % de la radiación de la luz del sol al tiempo que emite calor infrarrojo.
Tal y como señalan sus investigadores, si se utiliza esta pintura para pintar un techo con una superficie de 92 metros cuadrados, el interior de la estructura experimenta una refrigeración equivalente a la que se consigue utilizando aparatos de aire acondicionado alimentados por 10 kilowatios de potencia“.
Además, en julio de 2022 un profesor de la Universidad de de Northeastern (Massachusetts) diseñó un sistema que permite reducir la temperatura de los edificios hasta 12 grados sin necesidad de electricidad.
Este papel refrigerante absorbe el calor de los edificios producido por los electrodomésticos y puede mantenerse fresco bajo diversas condiciones de temperatura y humedad.