Después de los datos que arrojó FEGECA sobre las ventas de calderas murales en 2023, con una caída del 25 %, los fabricantes del sector hacen balance de un mercado que se tambaleó el pasado año, pero parece estabilizarse durante este ejercicio. El descenso se habría ralentizado y los proveedores cuentan cerrar 2024 con un descenso menos pronunciado.
Al cierre de la campaña ‘fuerte’ de calefacción, en marzo de 2024, la Asociación de Fabricantes de Generadores y Emisores de Calor (FEGECA) publicó su informe sobre el mercado de la calefacción y ACS en España en 2023. En aquel momento, y respaldado por las cifras que presentó a continuación, el presidente de FEGECA, Nicolás Klingenberg, resumió la situación del mercado en una frase que daba lugar al pesimismo. “El 2023 pasará a la historia como un año dramático para el sector de la calefacción”, aseguró tajante.
Para comprender los términos, es necesario conocer el contenido de dicho informe. El mercado de la calefacción y ACS cayó un 7,4 % durante el pasado año, con la bajada de hasta el 25 % en algunas familias, como lo es la de las calderas murales. Precisamente, las calderas murales experimentaron una caída notable, llegando a cerrar el año con 264.000 unidades vendidas. Durante el año 2022 -si bien fue una excepción junto al anterior a este- se vendieron 352.000 equipos de este tipo.
Ese 25 % se traduce en 88.000 calderas murales menos vendidas en apenas un año. Pero es que las calderas de pie también descendieron y lo hicieron en un 30,65 %. Klingenberg mostró, entonces, su preocupación por dichas cifras y destacó que algunas de las principales razones de tal descenso de la actividad “han sido el excesivo stock de los distribuidores durante años anteriores y la confusión generada en la esfera pública sobre la posibilidad de utilizar calderas en el futuro”. Dos motivos muy compartidos por los fabricantes de este tipo de sistemas de calefacción que, aunque aún no ha terminado el año 2024, se muestran mucho más optimistas con las ventas.
Aunque es difícil prever el final del ejercicio, teniendo en cuenta que tras el verano comienza la gran campaña de calefacción -y por ende el momento para aprovechar el tirón por parte de las grandes marcas de calderas-, la mayoría de los proveedores estiman que, aunque la bajada en ventas continúa, ya no será en caída libre. La previsión, al cierre de 2024, de ventas en concepto de calderas murales es de una caída de entorno al 10 % con respecto a 2023, alcanzando unas 237.600 unidades vendidas. Para entender el descenso, es primordial comprender el mercado.
El reportaje completo puede leerse en el número 20 de Cuadernos de Climatización y Confort, que ya está disponible en nuestro visor online.