De este modo, la sostenibilidad coge peso en la reglamentación de la construcción, objetivo para el que la Unión Europea ha desarrollado el marco Level(s).
El Gobierno de España se ha comprometido a desarrollar e incluir un documento básico dedicado a la sostenibilidad en la revisión del Código Técnico de la Edificación (CTE) de 2026. Así lo ha anunciado la directora general de Agenda Urbana y Arquitectura, María Teresa Verdú, quien ha mantenido una reunión en Madrid con 75 expertos de la edificación, del análisis de ciclo de vida y de la huella de carbono.
En dicho encuentro, se ha debatido sobre la mejor forma de implementar y de abordar este análisis de ciclo de vida en la reglamentación española. De este modo, la sostenibilidad coge peso en la reglamentación de la construcción, objetivo para el que la Unión Europea ha desarrollado el marco Level(s). Este proporciona un conjunto de indicadores y parámetros comunes para medir el comportamiento de los edificios en términos de sostenibilidad.
Más calidad a las edificaciones
“Aunque todavía no se conocen los detalles ni el contenido que tendrá este documento, felicitamos al MIVAU por esta iniciativa que podrá traer más calidad a nuestras edificaciones y que nos ayudará a cumplir los compromisos medioambientales”, destaca Dolores Huerta, directora General de Green Building Council España (GBCE).
De esta manera, Level(s) garantiza que ese documento esté alineado con las políticas europeas y supone una aproximación a la sostenibilidad, contemplando los tres ejes básicos: el social, el ambiental y el económico. “Animamos al Gobierno de España a que tome el marco Level(s) y la taxonomía europea de las finanzas sostenibles como base para elaborar ese documento básico dedicado a la sostenibilidad en el CTE”, resalta Paula Rivas, directora Técnica de GBCE.
Este anuncio del MIVAU llega poco antes de que Europa apruebe de forma definitiva la nueva Directiva Europea de Eficiencia Energética de la Edificación (EPBD), tras lo que deberá trasponerse a la legislación española.
“Esta norma obliga a estudiar las emisiones de los gases de efecto invernadero en todo el ciclo de vida, lo que permitirá ponerles un límite para alcanzar la descarbonización en 2050”, especifica Rivas.