Así lo ha decidido el Parlamento Europeo, tras la reunión mantenida en Bruselas con diferentes entidades del sector de la climatización y la refrigeración, entre las que se encontraba CNI. La Eurocámara ha abierto un concurso público para analizar el impacto de la normativa en las empresas instaladoras, el mercado de gases y el medioambiente.
El Parlamento Europeo anticipa la revisión del Reglamento Europeo de Gases Fluorados. En concreto, ha sido la Dirección General de Acción por el Clima (DG CLIMA) la encargada de abrir un concurso público para analizar el impacto de la normativa y su futura revisión, tras la reunión mantenida en Bruselas con diferentes entidades del sector de la refrigeración y la climatización.
CNI, que participó en dicho encuentro, puso de manifiesto que “desde la entrada en vigor del reglamento en 2015, han observado una serie de impactos críticos en las empresas, en particular en las pymes. Ejemplo de ello son las situaciones de suministro no planificables o precios exorbitantes de los gases de refrigeración a lo que hay que sumar que la intención principal del Reglamento europeo de proteger nuestro clima podría verse comprometida con el incremento de importaciones ilegales de gases”.
Nuevas fechas para la revisión
La reunión mantenida entre CNI y otras asociaciones con la Eurocámara tuvo lugar el pasado noviembre. Tras reflexionar sobre sus aportaciones, la semana pasada la Eurocámara publicaba la licitación previa a la revisión del Reglamento.
El concurso público, al que puede accederse aquí, para analizar el impacto del Reglamento y su futura revisión, estará abierto hasta el próximo 13 de febrero, fecha en la que finaliza el plazo para presentar propuestas.
Tal y como informa la Confederación Nacional de Instaladores y Mantenedores, los trabajos de revisión se iniciarán probablemente en verano de 2020, y finalizarán antes de diciembre de 2022.
Impacto en el medioambiente
El encuentro con el organismo europeo también contó con dos exposiciones por parte de fabricantes e instaladores. Wolfgang Zaremski, presidente de la Asociación de Fabricantes Europeos de Componentes de Refrigeración (ASERCOM), resaltó la “minúscula trascendencia con un 7,8 %, que tiene el sector de refrigeración y climatización comparativamente con otros sectores respecto a las emisiones de CO2”.
Éste también argumentó que “el actual sistema de cuotas, no consigue los objetivos pretendidos debido a la presencia masiva en todos los países de gas extracomunitario”.
Por su parte, Juerg Hagleitner, presidente de la Asociación austriaca de Técnicos de Refrigeración y Aire Acondicionado, expuso que “siendo el objetivo de este sistema de cuotas reducir de manera masiva la producción, la importación y, como consecuencia, el uso de gases fluorados con un alto potencial de calentamiento atmosférico (PCA); es precisamente este sistema de cuotas el que está causando interrupciones desproporcionadas en el suministro de gases fluorados en la refrigeración, el aire acondicionado y las bombas de calor”.
El mercado ilegal, protagonista
Unos datos a los que José Luis Uribe Echebarría, miembro del Comité Técnico de Confederación y presente en la reunión en Bruselas, añadió que “en España el fraude se acrecienta con la existencia del impuesto sobre los gases fluorados y las amplias posibilidades para la entrada ilegal de gases intra y extracomunitarios”.
Cabe mencionar que CNI valoró positivamente los esfuerzos de la CE para combatir el comercio ilegal de refrigerantes a través de la cooperación con las autoridades nacionales y con terceros países para intercambiar buenas prácticas, aunque “no es suficiente y se precisan medidas más efectivas”.
