La startup israelí Nostromus Energy ha desarrollado un método a través del cual utiliza un ladrillo de hielo para almacenar energía solar, que al final es dirigida al enfriamiento del espacio. Puede ser instalado tanto en edificios comerciales como industriales.
Icebrick. Este es el nombre del novedoso método que ha desarrollado la startup israelí Nostromo Energy y que permite almacenar energía solar para que pueda ser utilizada en aires acondicionados para refrigerar los espacios de manera sostenible.
Este “ladrillo de hielo” (Icebrick en inglés) surge como posible solución al desafío de almacenar energía solar entre el atardecer y el amanecer. El método es el siguiente: a través de Icebrik se almacena energía en cápsulas de hielo y la dirige a la refrigeración del espacio comercial, según explican desde la revista ISRAEL 21 C.
El dispositivo ideado por Nostromo puede ser instalado en el techo, sótano o en las paredes de edificios comerciales e industriales. De momento, se ha instalado en el techo del edificio de la empresa Medinol, en Jerusalén.
¿Cómo funciona?
Desde Nostromo, advirtieron que la red pierde varios megavatios cada día al atardecer, lo que exige grandes cantidades de almacenamiento. Además, descubrieron que con la congelación del agua se podría cubrir el 45 % de la carga de la red.
El funcionamiento del ladrillo de hielo es el siguiente: un cuerpo enfriador carga la matriz IceBrick haciendo circular anticongelante a menos de tres grados centígrados. Después, el enfriador usa la electricidad de bajo costo de la red en horas de menor actividad o de recursos renovables.
¿Por qué se elige el hielo?
Pero, ¿por qué se ha utilizado el hielo para obtener energía? Tal y como explica Yaron Ben Nun, fundador y director de tecnología de Nostromo en declaraciones a la revista ISRAEL 21 C, el objetivo de la empresa era contar con una “tecnología limpia y sostenible”.
Tras realizar una investigación, Ben Nun descubrió que el hielo es un material seguro y eficaz para retener la energía. Y que también es sostenible, puesto que el agua puede congelarse y derretirse una y otra vez. Por eso, apostó por el hielo.
Pruebas en más de 20 países
Según Nostromo, gracias a la aceptación de la solución en la aceleradora Anheuser-Busch InBev 100+, se podrá probar esta solución en unos 20 países.
Además, a principios del año 2021, Coca-Cola, Colgate Palmolive y Unilever se unieron para financiar y probar esta innovación en sus cadenas de suministro.
