Desde este miércoles, 20 de abril, utilizar la mascarilla en interiores ya no es obligatorio (salvo en determinados contextos). Tal y como figura en el Real Decreto 286/2022, aprobado ayer en Consejo de Ministros, "en el entorno laboral, de manera general, no será preceptivo el uso de mascarillas".
Este miércoles, 20 de abril, el uso de mascarillas en interiores ha dejado de ser obligatorio en cualquier contexto, salvo en tres específicos (centros sanitarios y sociosanitarios, así como los medios de transporte públicos y de viajeros), entre los que no figura el entorno laboral.
Tal y como estipula el Real Decreto 286/2022, aprobado ayer en Consejo de Ministros, la imagen que acompaña a esta noticia, con un instalador con mascarilla mientras realiza un servicio en un hogar, puede volver o no a repetirse, pero por voluntad propia del profesional o la empresa para la que trabaja.
Al final, en caso de duda y según el texto que hoy publica el BOE, serán los servicios de prevención de riesgos de las empresas los que fijarán la obligatoriedad o no de llevar mascarilla en interiores en cada compañía.
En caso de tratarse de empresas unipersonales o autónomos, será el propio instalador el que decidirá, aplicando “la responsabilidad individual”, si ve conveniente o no llevarla, pese a no ser algo preceptivo.
Fin mascarillas en interiores: el sector, ‘dividido’
En este sentido, el sector HVAC se muestra ‘dividido’ con respecto a seguir usando o no mascarilla en el trabajo.
Así lo evidencia una encuesta lanzada por este medio en la que un 37,14 % afirma que “no seguirá llevando mascarilla para trabajar, al dejar de ser obligatoria”; mientras que otro 37,14 % opina lo contrario: “Sí que vamos a seguir llevándola, en el entorno laboral, por voluntad propia”.
Imagen del gráfico resultante de la encuesta lanzada por este medio este mismo lunes.
Por su parte, un 14,29 % aclara que “en caso de tener un contacto muy estrecho con un cliente (por ejemplo, para entrar a su hogar), le preguntará primero a él si quiere que se la ponga”. El 11,43 % restante afirma que “dependerá de lo decidido en su empresa”.
Tal y como aclaran desde APIEM, “al final, esta decisión dependerá, en gran medida, de las características del recinto: si se puede ventilar, si permite guardar las distancias, del aforo, etcétera”.
En este sentido, el Gobierno también ha mencionado quee el uso de mascarilla “es recomendable en los establecimientos cerrados en los que confluyan un gran número de personas sin posibilidad de mantener la separación ni una correcta ventilación”.
Los 3 casos en los que ‘sí’ hay que llevar mascarilla
Hay que recordar que las tres excepciones en las que será obligatorio el uso de mascarillas en interiores son:
- Centros, servicios y establecimientos sanitarios como hospitales, centros de salud o farmacias (es preceptivo el uso de mascarilla tanto para visitantes como para trabajadores. No lo será para personas ingresadas, siempre que no salgan de su habitación).
- Centros sociosanitarios como residencias de mayores (visitantes y trabajadores han de seguir usando mascarilla, salvo los residentes que no tendrán que llevarla).
- Medios de transporte públicos y de viajeros (salvo en andenes y estaciones de viajeros donde no será necesario llevar puesta la mascarilla).
