El Gobierno aprueba la Estrategia Española de Economía Circular

La Estrategia Española de Economía Circular (EEEC) ya tiene la aprobación del Consejo de Ministros. Tal y como anunció ayer, Teresa Ribera, lo hizo este martes, 2 de junio, incluyendo algunas actualizaciones de este marco estratégico, que se concibe como “una palanca fundamental para la innovación de materiales y de procesos, la creación de empleo y la generación de nuevos modelos de negocio“.

Un conjunto de acciones que -continuaba explicando la titular de la cartera de Transición Ecológica- permitirán también “el fomento de la economía local (a través del consumo de proximidad),  y reducir nuestra dependencia de recursos del exterior, mejorando así la capacidad para disponer de recursos para otras políticas, en un momento particularmente frágil de las cadenas de suministro, que se han visto interrumpidas o en dificultades por esa limitación en la movilidad a escala global (provocada por la  pandemia del COVID-19).

¿En qué consiste la EEEC?

La mencionada Estrategia Española de Economía Circular, bautizada como “España Circular 2030” – y que puede consultarse aquí– persigue los siguientes objetivos a lo largo de esta década:

• Reducción de un 30 % del consumo nacional de materiales en relación con el PIB respecto a 2010.
• Una disminución en la generación de residuos de un 15 %, permitiendo situar las emisiones de gases de efecto invernadero imputables al sector residuos por debajo de los diez millones de toneladas anuales.
• Reducir la generación de residuos de alimentos de toda la cadena alimentaria, logrando hasta un 50 % de reducción per cápita en los hogares y consumos minoristas, y un 20 % en las cadenas de producción y suministro a partir del año 2020.
• Reutilizar hasta un 10 % los residuos municipales.
• Mejorar hasta un 10 % la eficiencia en el consumo de agua.

Además de estas metas, tal y como añadió Ribera, “se han identificado seis grandes sectores productivos que consideran prioritarios, y están preparados para iniciar este recorrido”: construcción, industria y bienes de consumo, agroalimentario, pesquero y forestal, textil y turismo.

Anteproyecto de Ley de Residuos

Asimismo, el Consejo de Ministros de este martes ha dado luz verde al anteproyecto de Ley de Residuos y Suelos Contaminados, ya en trámite de información pública, que, tal y como avanzó la vicepresidenta cuarta del Ejecutivo “incluye, por primera vez, limitaciones al uso de plásticos de un solo uso”.

El nuevo texto prevé un objetivo de reducción de residuos del 15 % en 2030 (respecto a 2010); objetivos de reutilización y reciclado para los años 2025, 2030 y 2035. Y se introduce, a partir del año 2025, la recogida separada de textil, aceites de cocina usados y residuos domésticos peligrosos.

“Además, se adelanta la recogida separada de bioresiduos a 2022 para los municipios con más de 5.000 habitantes y en 2024 para el resto de los municipios”, tal y como comentó Ribera.

Más aspectos destacados

Entre otros aspectos mencionados en el anteproyecto, podemos mencionar los siguientes:

• Desde julio de 2021, se prohíben determinados artículos que cuentan con materiales que permiten la sustitución del mismo por otro de igual utilidad, pero con otro tipo de materia prima: pajitas, bastoncillos, platos de plástico o productos cosméticos y de limpieza que utilizan o añaden microplásticos en su producción final.

• Los productores de materiales plásticos serán los responsables de hacerse cargo o financiar la recogida de residuos como recipientes de plásticos, bebidas, bolsas de plástico, toallitas húmedas, globos, colillas y artes de pesca.

• El objetivo de recogida separada de botellas de plástico se eleva a un 77 % en el año 2025 y a un 90 % en el año 2029. Y los recipientes alimentarios de un solo uso deberán reducirse en un 50 %, debiendo ser sustituidos por otro tipo de materiales, y en un 70 % en el año 2030.

Además de reducir la entrada de plástico al mercado, el Gobierno ha establecido en el anteproyecto de Ley de Residuos un impuesto a los envases de plástico no reutilizables: “un impuesto de carácter indirecto que recaerá sobre la fabricación, importación o adquisición intracomunitaria de envases de plástico no reutilizables que vayan a ser objeto de utilización en el mercado español”, detallaba la ministra de Transición Ecológica, que hacía referencia a que se darán nuevos pasos en materia de una fiscalidad verde.

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Asimismo, y en el ámbito de la prevención, “a partir de 2021, queda prohibida la destrucción de excedentes no vendidos de productos no perecederos tales como aparatos eléctricos, textiles o juguetes, entre otros”, señaló. Con las excepciones que suponga que los mismos deban ser destruidos por razones de seguridad.

Finalmente, este anteproyecto también incluye medidas para acabar con la llamada obsolescencia programada, con obligaciones de fabricar y usar productos que sean eficientes en el uso de recursos: duraderos, reparables, reutilizables. “Es decir, pensar inicialmente en el diseño y la fabricación del producto con una duración más amplia; promoviéndose las actividades de reparación y reutilización que habían ido perdiendo su espacio a lo largo de los años”, subrayaba Ribera.

Cabe mencionar estas medidas forman parte de un paquete que se suma al proyecto de Ley de Cambio Climático y Transición Energética que remitieron al Parlamento hace quince días.