El pasado 17 de octubre la Comisión Europea dio un paso importante en su lucha por la sostenibilidad energética con la publicación de la primera guía sobre la Directiva de Eficiencia Energética de los Edificios (EPBD).
Uno de los aspectos clave de la directiva es la eliminación de incentivos financieros para “la instalación de nuevas calderas independientes alimentadas por combustibles fósiles”, lo que deberá entrar en vigor el 1 de enero de 2025.
Este cambio busca promover tecnologías más limpias y sostenibles, alineándose con los objetivos de transición energética de la Unión Europea. Y desde FEGECA queremos destacar los aspectos más relevantes.
¿Qué es un documento de orientación?
La guía publicada por la Comisión Europea no es un documento legislativo, sino una interpretación no vinculante de una disposición legal para ayudar a los Estados miembros en la implementación de la normativa de la UE en sus legislaciones nacionales.
A pesar de no ser vinculante, la guía resulta relevante, ya que muchas naciones europeas adoptan estas recomendaciones sin modificaciones.
Objetivo de la orientación
La orientación está diseñada para ayudar a los Estados miembros a aplicar el artículo 17(15) de la EPBD, que establece que, “a partir del 1 de enero de 2025, no proporcionarán incentivos financieros para la instalación de calderas independientes alimentadas por combustibles fósiles, salvo excepciones específicas”.
Además, la guía proporciona detalles sobre conceptos como “calderas independientes alimentadas por combustibles fósiles”, su definición, y el marco de supervisión de cumplimiento.
Definiciones claves
Para comprender el resto del texto, es importante aclarar las siguientes definiciones:
- Calderas independientes: Se definen como aquellas calderas que no están combinadas con otros generadores de calor que utilizan energías renovables (bombas de calor o energía solar). Esta distinción permite que los sistemas híbridos, que utilizan en gran medida energías renovables, puedan seguir recibiendo apoyo financiero.
- Combustibles fósiles: Son aquellos de origen no renovable, como el gas natural, el petróleo y los combustibles sólidos.
- Calderas independientes alimentadas por combustibles fósiles: La guía aclara que, cuando una red local transporta principalmente gas natural, no deberían incentivarse calderas de gas. Sin embargo, cuando la red contiene mayoritariamente combustibles renovables, estas tecnologías sí pueden recibir incentivos.
Incentivos para tecnologías híbridas
Para incentivar el uso de energías renovables, la Comisión Europea recomienda que los incentivos financieros para sistemas híbridos se otorguen de manera proporcional a la cantidad de energía renovable que utilizan. Así, los sistemas 100 % basados en renovables recibirían mayor apoyo económico en comparación con los híbridos, que se incentivan como solución temporal.
La proporción considerable de energía renovable en estos sistemas queda a interpretación de cada Estado miembro, lo cual brinda flexibilidad para adaptarse a las diferentes realidades energéticas.
Interpretación de los incentivos
La disposición incluye una amplia definición de ‘incentivos financieros‘, abarcando todas las formas de apoyo público, como los incentivos fiscales o reducciones de impuestos. Hay que destacar que las actividades de mantenimiento, reparación o desmantelamiento de estas calderas no están sujetas a esta prohibición, por lo que podrían seguir incentivándose.
Si bien la disposición establece una fecha límite para estos incentivos, la Comisión Europea puntualiza que, si un incentivo fue anunciado antes del 1 de enero de 2025, se considera una “expectativa legítima”, permitiendo que el desembolso real ocurra después de esta fecha.
Sobre el Reglamento de Etiquetado Energético
La EPBD no afecta al Reglamento de Etiquetado Energético, que establece que las dos categorías más eficientes energéticamente pueden recibir incentivos financieros. Según la Comisión, las calderas de combustibles fósiles independientes no suelen pertenecer a estas categorías, pero sí aquellas de biomasa, que tienen su propio reglamento y podrían recibir incentivos si cumplen con los requisitos de eficiencia.
Excepciones a la prohibición de incentivos
La guía permite ciertas excepciones a esta prohibición. Los proyectos que hayan sido seleccionados antes de 2025 para recibir fondos de mecanismos específicos de la UE, como el Fondo Europeo de Desarrollo Regional o el Fondo de Cohesión, podrán recibir financiación.
Cabe destacar que estos fondos podrán destinarse para reemplazar sistemas antiguos de carbón o lignito por calderas de gas natural, apoyando de esta manera una transición energética intermedia hacia tecnologías más sostenibles.
Próximos pasos
La Comisión Europea seguirá emitiendo guías sobre otros conceptos importantes dentro de la EPBD, como las ‘normas mínimas de desempeño energético’, los edificios cero emisiones y, también las ‘calderas de combustibles fósiles’ de cara a su eliminación para 2040. Esta transición busca garantizar un marco legal y financiero que impulse una Europa más sostenible y menos dependiente de los combustibles fósiles.
Con estas acciones, la Unión Europea refuerza su compromiso de reducir las emisiones de carbono, en consonancia con el Pacto Verde Europeo y los objetivos de neutralidad climática para 2050. Al mismo tiempo que hace una apuesta clara por todas las tecnologías que trabajen con energías renovables, considerando aquellas que lo harán a corto plazo, como son las calderas de condensación, a las que otorga un lugar destacado dentro de la descarbonización de los edificios, ya sea trabajando con biometano o hibridadas con otras tecnologías.